François-Xavier Courrèges
The things we read are not all written
Barcelonajun. 19 - jul. 25, 2008

A través de sus intervenciones, Courrèges crea atmósferas y ambientes que envuelven al espectador en un mundo introspectivo y poético.
A través de sus intervenciones, Courrèges crea atmósferas y ambientes que envuelven al espectador en un mundo introspectivo y poético. Al margen del cliché, y sin caer en un patetismo sentimental, explora en sus propuestas la naturaleza simple y contradictoria de las emociones. El amor, la decepción, la soledad, la fragilidad de la identidad, forman parte del universo melancólico del artista. En sus vídeos y fotografías Courrèges renuncia a una frivolidad estética así como a una complejidad narrativa, y desarrolla una obra marcada por su pureza y sencillez estructural.
The things we read are not all written, la figura retórica que da título a la exposición, propone una resolución plástica en una escritura automática, casi compulsiva que recorre las paredes de la galería al son de una música pop. La serie fotográfica I Can See Into The Future muestra una escritura cósmica y surreal realizada en luces de neón de color púrpura que podría evocar el abecedario metafísico de los astros de Mallarmé, descubierto en un mundo artificial de luces urbanas. Del mismo modo, la serie de dibujos Writing to you #3 son cartas no compartidas, textos sin palabras que, en un movimiento repetitivo y casi hipnótico, convierten la obra del artista en discursiva sin encontrar un principio o un final narrativo.
Courrèges propone una relación con el mundo que es física y a su vez emocional, y que opone así la dicotomía moderna entre razón y sentimiento, acercándose a las sensibilidades de los artistas románticos y simbolistas del siglo XIX. Así relaciona cada estado mental o emocional con un paisaje, una postura, un tono cromático, un tipo de música; son los seres y objetos encontrados en su semántica iconográfica -un hombre bailando en un campo, una figura solitaria contemplando el sol‚ forman parte del despliegue de una estética de la emoción. Mediante la elección de luces, colores, música, François-Xavier Courrèges invita a una inmersión física en una instalación global, un lugar donde reconstituye multitud de vivencias autobiográficas.
François-Xavier Courrèges nace en París el 1974, donde trabaja y reside en la actualidad. Entre sus exposiciones destacan: My Night, Galerie Baumet Sultana, París (2008); Hasta el infinito y más allá, CAS Centro de las Artes de Sevilla (2008); Le Grand Tour, Collection Lambert at Villa Medicis, Roma (2007); Bird Watching, Artcentre de Vishal, Haarlem, Països Baixos (2007); Entre patio y jardín, Fundación-Colección Jumex, Puebla, Mèxic; J’ai un rêve, Abbaye de Maubuisson, Saint-Ouen l´Aumone, França (2005); Shanghai à Paris, Musée des Beaux-arts, Xangai, Xina (2005).