Enric Farrés Duran
Cualquier objeto excepto un papel
Barcelonajun. 29 - sept. 23, 2016

Los Papeles del Siglo, la colección que el artista ha ido construyendo en los últimos años, se presenta en esta ocasión con la que será aparentemente su última y definitiva organización.
NoguerasBlanchard se complace en presentar, en el marco de la 5ª edición de Art Nou, la exposición Cualquier objeto excepto un papel, de Enric Farrés Duran (Palafrugell, 1983).
Los Papeles del Siglo, la colección que el artista ha ido construyendo en los últimos años, se presenta en esta ocasión con la que será aparentemente su última y definitiva organización.
Cartas de amor y de odio, cheques, recetas de cocina y médicas, dibujos técnicos, artísticos, automáticos y naifs, demandas judiciales, instrucciones y listados de todo tipos forman Los Papeles del Siglo, una colección integrada por 2.213 elementos, y que ha sido construida mediante la paciente acumulación de todos los papeles que se encontraban contenidos dentro de los libros que pasaban por las manos de Enric Farrés mientras trabajaba en una librería de segunda mano. Entendiendo la colección como una herramienta de trabajo, el artista ha desarrollado talleres –La colección como tentativa, Macba 2016–, infiltraciones –Tres cosas raras, historia de una desaparición, Fundación Antoni Tàpies 2014–, exposiciones –Una exposición de dibujos, Galería etHall, 2015–, conferencias –Los mejores, Sant Andreu Contemporáni, 2014–, publicaciones –189 errores, Can Editions, 2016– o archivos –Establecer un principio de procedencia, La Casa Encendida, 2016–.
En la pieza central de la exposición se nos presenta toda la documentación de estos proyectos de manera estratificada, en forma de capas de significación situadas sobre una mesa rodeada de cuatro taburetes. El conjunto de estos elementos constituye un espacio donde el visitante puede sentarse y consultar la documentación, encima de la cual encontramos un objeto concreto: un pisapapeles. Este pisapapeles es el protagonista de la exposición, puesto que constituye la última organización de Los papeles del Siglo. Se han utilizado los 2.213 papeles para construir este objeto anodino que completa el título de la exposición Cualquier objeto excepto un papel –es un pisapapeles–. Haciendo referencia a la transformación estrictamente material de los papeles, a la construcción de un elemento donde la forma es un aspecto irrelevante en la definición del propio objeto, y a la carencia de significado más allá de su uso en este espacio y tiempo determinado, podemos preguntarnos: ¿qué implicaciones tiene este gesto iconoclasta?
Esta nueva organización exige aceptar una serie de características que afectan la propia naturaleza de la colección de papeles, puesto que en primer lugar, ya no son unidades mínimas de significado susceptibles de ser material para utilizar en un proceso de edición, sino que obedecen a la lógica de la muestra: por pequeño que sea un fragmento del pisapapeles siempre contendrá todo el conjunto de los 2.213 papeles que lo conforman. Esta disolución de la individualidad de los elementos impide re-significarlos individualmente, puesto que afecta el carácter temporal de la colección de una manera rotunda –no podemos dar marcha atrás–.
Con la pasta de papel sobrante a la hora de construir el pisapapeles se han realizado tres objetos más: un cuadro, una escultura y una cosa, los cuales son –como mínimo– aquello que anuncian: objetos.