Francesco Arena

Comprender los hechos del pasado como objetos inertes capaces de ser aislados y dispuestos en un relato histórico no contempla el movimiento del que está hecho la historia. Francesco Arena plantea un acercamiento a otro modo de pensar la temporalidad, una apertura de la noción de historia, permitiendo ver irrupciones en el curso de las cosas donde sólo había una línea marcada por causas y efectos. De este modo, lo histórico y lo personal se entrecruzan constantemente en la obra de Francesco Arena, que decide abordar y representar sucesos históricos a partir de una relación fáctica consigo mismo. Así pues, la relación del individuo con la historia se convierte en uno de los aspectos cruciales de sus proyectos, en los que son frecuentes el uso de los datos antropométricos del propio artista (como su peso, masa corporal, altura, la distancia del suelo a sus ojos…), cifras tangibles como testimonio de una historia cuantificable.

El próximo 26 de septiembre se cumplirán 78 años de la muerte de Walter Benjamin en Portbou. El centro de disputa entre Benjamin y su generación fue precisamente el concepto decimonónico de temporalidad histórica, es decir, una historia conforme a un fin y a un sujeto que actúa acorde a una linealidad uniforme. La obra, Angolo Stanco, de cuyo nombre toma título la exposición, radica en la distancia entre el presente y la muerte de Benjamin, rompiendo el continuum de la historia para dar lugar a la emergencia y el despliegue de conexiones de temporalidades singulares, a la configuración de la historia como base de un movimiento disruptivo. En ella, un performer de 78 años relata su vida al espectador, encontrándose sentado en una estructura de hierro que forma ángulo recto (elemento fundador de la arquitectura para el artista); de este modo, Francesco Arena analiza la idea de la celebración del aniversario de una muerte a través de su opuesto.

Cada acontecimiento se vuelve materia de trabajo en la obra de Francesco Arena, e independientemente de la duración de éste, “el instante en sí no es más que la continuidad del tiempo, puro límite que a la vez reúne y divide el pasado y el futuro” 1. Su lectura de los hechos del pasado, que reúne lo eterno y lo efímero, se manifiesta a través de un fragmento que la intercepta, así pues, éstos pueden estar comprendidos en diferentes espacios temporales: en un año como en Marble between 1 year, pieza en la que el artista encapsula un bloque de mármol entre dos agendas; en el tiempo que Arena necesita para que los sobres de azúcar que le sobran de su café alcancen la medida de un metro en Metro di zucchero smezzato (78 giorni); o en los 4’33’’ de silencio de John Cage contenidos en 1.299,5 cm de cinta de cassette, y a su vez contenidos en la medida de los brazos extendidos del artista, materializada en bronce, en 8 Arms with Times.

Bajo esta perspectiva de convergencia en el presente de situaciones y objetos distantes en tiempo Francesco Arena nos sugiere la oportunidad de hacer de nuestro tiempo un espacio de reflexión y de acción en Angolo Stanco. La posibilidad de leer en el presente, en nuestra contemporaneidad, algo más que el agotamiento de la historia.

1 Giorgio AGAMBEN, Infancia e historia. Destrucción de la experiencia de la historia, Buenos Aires: Adriana Hidalgo, 2007, pg. 132.

Francesco Arena nació en Torre Santa Susana, Bríndisi, Italia, en 1978. Vive y trabaja en Cassano delle Murge, Bari, Italia.

Entre sus exposiciones individuales recientes figuran: Due ritratti con persona, Sprovieri Gallery, Londres, Reino Unido (2018); Perimetro con quattro opere in uno spazio, TRA, Treviso, Italia (2016); Jannis Kounellis – Francesco Arena, Palazzo Baronale, Novoli, Lecce, Italia (2015); Onze mille cent quatre-vingt sept jours, Frac Champagne-Ardenne, Reims, Francia (2013).

También ha participado en numerosas exposiciones colectivas los últimos años, como: The Humans, Kunstmuseum St.Gallen, St.Gallen, Suiza (2018); Bajo el brazo: entre la palma de la mano y la axila, CaixaForum, Barcelona, España (2018); MAXXI re-evolution, MAXXI, Museo nazionale delle arti del XX secolo, Roma, Italia (2017); Mario Merz Prize. Finalists exhibition, Fondazione Merz, Turín, Italia (2017); Happy ending, Frac Champagne-Ardenne, Reims, Francia (2016); Ennesima, Triennale di Milano, Milán, Italia (2015); Italy in Songeun. We have never been modern, SongEun Artspace, Seúl, Corea del Sur (2014); Vice Versa, Italian Pavilion, 55 Biennale di Venezia, Venecia, Italia (2013).